• Entre las muchas cosas que no le gustan a Donald Trump se cuentan las grandes firmas globales. Sin rostro ni raíces, se les acusa de perpetrar una "carnicería" contra los estadounidenses comunes al trasladar puestos de trabajo y fábricas al extranjero. Su respuesta es domesticar estas multinacionales depredadoras. La baja de impuestos atraerá su dinero de regreso a casa, los aranceles trabarán sus cadenas de producción internacionales y se reescribirán los acuerdos comerciales que las ayudan a desarrollar sus negocios. "Todo lo que tienen que hacer es quedarse", les dijo Trump a los patrones estadounidenses. Encargo: Diario La Nación (Argentina) / Lunes 30 Enero, 2017.
